Algunas aplicaciones para Android requieren ser instaladas como Administrador para poder realizar sus acciones correctamente. Por ejemplo, existe una aplicación para Android denominada Screen Lock que dispone de un widget que al tocarlo, apaga la pantalla.
Esta acción, no obstante, requiere que concedamos permisos especiales para el bloqueo de pantalla.
Cuando la instalamos y la abrimos por primera vez, nos solicita dicho permiso y nos advierte de que tendremos que quitárselos de nuevo antes de desinstalarla.